Continúo posteando, como todos los fines de semana, mis fotos de detalles de puertas del Camino de Santiago. Hoy van otras cinco.
Cada vez que vuelvo a mirar estas fotos, que han perdido su filiación a sus lugares de origen al estar todas juntas en una colección que no respeta tiempo ni lugar, aparecen nuevas historias en mi imaginación: mirando el envejecimiento de la madera, el óxido en las cerraduras, las marcas de golpes, o el color de la pintura o el lustre. ¡Todas aparentemente iguales, y todas tan distintas!.
Disfruten de esta nueva entrega, y disfruten también de lo que la imaginación pueda decirles sobre estas fotos.
Cada vez que vuelvo a mirar estas fotos, que han perdido su filiación a sus lugares de origen al estar todas juntas en una colección que no respeta tiempo ni lugar, aparecen nuevas historias en mi imaginación: mirando el envejecimiento de la madera, el óxido en las cerraduras, las marcas de golpes, o el color de la pintura o el lustre. ¡Todas aparentemente iguales, y todas tan distintas!.
Disfruten de esta nueva entrega, y disfruten también de lo que la imaginación pueda decirles sobre estas fotos.